viernes, 10 de octubre de 2014

Iguala exterminio. (Quince días).

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El jardín de la muerte de  Hugo Simberg.

Nota 1.- Pues mal, hasta ahorita lo único seguro que tenemos en cuanto a noticias de los actos criminales de Iguala es que ni el presidente municipal de Iguala acepta culpa y que de igual manera lo hace el gobernador, o sea que aquí en Guerrero pueden andar con toda confianza grupos armados, uniformados o no, disparando a la gente sin que los que deben protegerla haga algo por evitarlo. Los ejecutivos ni miran ni oyen ni hablan; bueno, esto último sí mucho pero para decir tonterías.


Nota 2.- Las líneas de investigación que se presentan, al parecer, de acuerdo a las noticias que llegan a la población, serían las siguientes:


Ajuste de cuentas del crimen organizado.


Ajuste de cuentas del Gobierno desorganizado.


Ajuste de cuentas en sociedad, del crimen organizado con el gobierno desorganizado.


Mientras tanto el Gobernador, a su modo, está resolviendo la situación regalando uniformes nuevos a los Avispones.


Nota 3.- En diciembre 12 del 2011 sucedió algo similar a lo sucedido en Iguala; entonces fue en Chilpancingo, subsecuentemente las cosas corrieron como ahora, ya pasaron tres años de aquel hecho y no se ha castigado a ningún culpable, tal parece que ese es el sistema del actual gobierno, matar a quienes le molestan luego culpar a alguien, pero nunca castigarle.


Hoy dos de octubre, no se olvida que en 1968 también mataron jóvenes estudiantes, entonces tampoco se castigó a nadie. Quien aceptó la responsabilidad entonces, argumentó que lo hizo para salvar a la patria y que los que murieron fueron soldados.


Así suceden las cosas en México, y no han cambiado porque quienes nos gobiernan son producto de los mismos usos y costumbres. Respaldada por algunos pobladores que se conforma con vestir bonito y hacer panza a costillas del erario.


Nota 4.- Dos delitos del orden común, o sea dos asesinatos múltiples arteros en dos sitios distintos. Primero se unifican los crímenes para engañar a la población dando la visión de que fue un solo acto, después se mediatizan mostrando lo rebelde que son los de un grupo afectado para confundir y polarizar la culpa en la conciencia del colectivo, ahora se politizan los escenarios para diluir la importancia de castigar al culpable como criminal; a cambio se busca darle castigo político o sacarlo del escenario del crimen. Nada nuevo en la manera depravada y perversa de actuar de quienes dicen ser gobierno democrático del pueblo.


Nota 5.- Reseña: El 26 de septiembre inician los hechos con el ataque por parte de la policía de Iguala a los estudiantes de Ayotzinapa. La versión de los estudiantes es que en varias patrullas secuestraron a otros estudiantes y que policías municipales les dispararon hiriendo y matando algunos; el mismo día en otro lugar un comando armado intentó asesinar a los futbolistas del equipo profesional de Chilpancingo Los Avispones, matando al chofer y a uno de los futbolistas y hiriendo a varios individuos más. Comentan quienes fueron atacados, que no los pudieron matar a todos; porque al morir el chofer, quedó la puerta sellada y ya no pudieron entrar.


Después se detienen a todos los policías de iguala e intentan detener al presidente municipal quien se da a la fuga. Se menciona de media centena de desaparecidos estudiantes.


Se inicia búsqueda oficial con bombo y platillos de los desaparecidos pero no del supuesto culpable.


Se descubren cuerpos de personas muertas en un lugar cercano a iguala, gracias a que dos sicarios infiltrados entre los policía detenidos dijeron donde acostumbraba tirar los cuerpos de sus víctimas, claro estos sicarios son personas nobles y cooperadoras por lo que dijeron todo de buena voluntad; sin tortura, además deberán darles el millón de pesos ofrecido en recompensa por el gobierno estatal a quien dijera datos para localizar a los desaparecidos.


En estos momentos ya se da por culpable al presidente municipal de Iguala, fugado y que de seguro nunca encontrarán, al que se le acusa de tener nexos con grupos mafiosos o sea el crimen organizado, que supuestamente son los que ejecutaron a los avispones. Delito por el cual, dicen quienes saben, no se requiere desafuero, pero que a quienes lo acusan no les importan y se entretienen buscando el desafuero del presidente de Iguala.


Se promete, como siempre se promete en las elecciones, justicia y tapar el pozo para que dejen de suceder estos “casos aislados”.


Mientra, en Guerrero, en este tiempo que ha pasado, ya mataron a más individuos que los que se buscan. Seguiremos después.


Nota 6.- Cuando existe un asesinato, sobre todo uno múltiple, existen muchas maneras de estar implicado como culpable. No solamente el actor material es culpable; sino que un conjunto de individuos alrededor de la masacre también lo son, ya sea por complicidad, por haber ingeniado u ordenado el asesinato o aquel que pudiendo evitarlo o teniendo la obligación de hacerlo no lo hace; o sea, por omisión. También son culpables todos aquellos que de una u otra manera lo justifican o salen beneficiados por él.


Así pues con todo respeto que merece la figura de gobernador, que pocos respeta incluso los que la portan, quiero decirle al que la ostenta ahora, que si sus manos están limpias es porque se las lava con los jabones caros que le pagamos los causante, pero de que se las manchó de sangre no queda duda, ya que siendo él el poder en Guerrero y el obligado por la constitución de dar seguridad, es un asesino por omisión; al menos hasta ahora, salvo que se le prueben otras acciones.

http://www.uam.es/personal_pdi/economicas/cresa/text11.html


Por otro lado no existe mejor suerte para aquel investigador honesto de un crimen dentro de un estado corrupto, que encontrarse con la lista de los funcionarios pagados por los criminales, que suerte que se las van a dar. Aprovechen para encarcelar a todos los de la lista.


Nota 7.- Teorías conspirativas en el imaginario social de Chilpancingo:


(La política)Los priistas quieren sacar al PRD de Guerrero, los muertos solamente son daños colaterales.


(La prepotente)El presidente castigó a los de Ayotzinapa porque se molestó de que fueran a fastidiar los informes que iban a dar él y su esposa además que molestaron a la esposa en su fiesta pipiris nice. Los muertos no importan él está respaldado por los cárteles además de tener la fuerza pública de Iguala.


(México casino) Estuvieron fuertes las apuestas durante el partido de Los Avispones. Quienes perdieron grandes sumas (obviamente de los cárteles) mandaron a liquidar a los vencedores (Los Avispones), los estudiantes fueron confundidos con los deportistas.


(Poder absoluto) Peña Nieto o quien lo puso no está dispuesto a los reclamos; así que inicia una época de represión acompañada de exterminio de la disidencia. Los Avispones sólo fue una confusión afortunada para lograr su objetivo.


(El mal) Algún cártel hizo leva quería jóvenes para sus filas de sicarios. A los Avispones no pudieron levantarlos porque la puerta ya no se pudo abrir.


(Defendiendo territorios) Los del cártel afectado por las comunitarias, sabían que entre los estudiantes de Ayotzinapa y los avispones iban hijos de comunitarios y fueron por ellos para presionar a esas fuerzas para que liberen sus plazas.


(De todo) Tanto cárteles y gobierno son uno solo y actuaron para su beneficio; o sea todo lo anterior. Los muertos son parte del sistema que utilizan para mantener a la población en un estado de terror. La opinión internacional no le preocupa porque tiene de su lado los países más represores y criminales.


Nota 8.- Cuando se supo que balearon a los estudiantes de Ayotzinapa, la culpa del problema señalaba al presidente municipal. Se intentó resolverlo deteniendo a los policías y al presidente municipal. A los policías los atraparon pero el presidente municipal se les fugó.


Al salir a la luz pública que había cincuenta desaparecidos la acción emprendida por el gobierno ya no era suficiente; la noticia fluía por toda la nación, se empezó a pedir entonces la cabeza del gobernador, él no huyó pero emprendió acciones dilatorias, a diferencia del presidente municipal que lo hizo para no ser chivo expiatorio, el gobernador se queda y resiste en el puesto con la idea, probablemente, que dilatando las cosas, con el tiempo se calmarán las cosas. (El tiempo es bálsamo de todo mal)


Ahora que se empieza a sospechar que la desaparición terminó en exterminio, la nota fluye por todo el mundo y la cabeza del gobernador ya no será suficiente. Él lo sabe de ahí que finja resistencia, pero al parecer intenta proteger a su cuate o cómplice, el presidente de la república, o hundirlo sabiendo que es el culpable y que será el próximo requerido por la comunidad internacional.


Concluyendo, la resistencia del gobernador de Guerrero a pedir licencia para deslindar responsabilidades, ya que los puestos de elección no son renunciables, es muestra tangible de la culpa, en la masacre, de él y del Presidente de la República.

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