lunes, 15 de febrero de 2016

limpiadores.




Foto de Edgar P. Miller

Recuerdo claramente cuando era niño como por las calles, la mayoría sin pavimentar; algunas empedradas, pero en todas los animales domésticos andaban sin preocupación por ellas. Por ahí verán alguna foto de mediados del siglo pasado donde los burros caminaban en pleno centro del lugar, hombro a hombro con los políticos del momento.

Pero dejemos a un lado a los políticos de entonces y por ahora no echaré a perder el día hablando de los inútiles de ahora.

Fíjense, regresando a lo de los recuerdos, que entonces los animales domésticos citadinos eran muy diferentes a los actuales, los perros eran pocos, gatos también ya ni decir erizos y cuyos ni mucho menos otros que ahora se tiene como mascotas, no, entonces eran los asnos ya mencionados, algunos bovinos, equinos, chivos y aves de corral, pero principalmente había los simpáticos cerdos; cuches, marranos, cochinos, cerdos; bueno pues, los porcinos.

Bien, de este animalito es de quien quería hacer un comentario, fijense que era algo así como el encargado de la limpieza del lugar, por voluntad propia desde luego, ellos se la pasaban husmeando cada rincón en busca de desechos orgánicos que los pobladores tiraban por todas partes; como lo hacen ahora, sí, sólo que entonces no existían los desechables sintéticos, por eso los cuches bien que se comían todos los desechos, incluso los excrementos de aquellos, por cierto muchos, que defecaban al aire libre, ya que entonces muchas viviendas no tenían sanitarios como sucede ahora, agua ni de broma teníamos en casa, así que cualquier rinconcito del pueblo se convertía en el deseado excusado. Pues bién, aunque la gente era igual de sucia como la de ahora, antes había menos basura tirada en las arterias, además esos limpiadores eran los mismos animalitos con que después se hacía el pozole.

Ahora es muy diferente, resulta que los cochinos ya no hacen eso. Llegó la modernidad y estos animales que vivían en libertad antes, ni les digo como la pasan ahora porque se volvería telenovela en lugar de narración. Mejor concluimos la nota, diciendo que siguen los pobladores tirando basura por todas partes, defecando y comiendo pozole; y a quienes hacen eso, los molestos les dicen marranos, cochinos; pero como los recuerdo yo, los marranos hacían lo contrario.

No hay comentarios:

Publicar un comentario