lunes, 15 de julio de 2013

Para los turistas.

Foto de Joel Meyerowitz
F.L., auxiliar del ministerio público de Chilpancingo, recibe una llamada en donde le avisan que están tirados diez cuerpos bajo el puente que comunica a una de las colonias del poniente. Llama a sus ayudantes y en un vehículo oficial de trescientos mil pesos se dirigen al sitio, bajo una lluvia intensa  los peritos hacen el levantamiento del área del crimen de la manera acostumbrada, de regreso a las oficinas se asigna el caso a los investigadores, quienes inician las pesquisas.
Amanece, F. L. le pide a su secretaria le traiga un café del Oxxo; antes esperaban a la del chilate; mientras regresa, empieza a leer el periódico traído por un chico hace unos momentos, en la primera plana del diario a seis columnas: “Seguridad y atención esmerada a quienes visiten el estado: Aguirre “ La mirada de F.L. se sigue de filo hasta la chica que aparece a la derecha de la primera plana, inmediatamente después del enunciado;  enseguida, abre el periódico en la sección de espectáculos, sube sus pies al escritorio, respira hondo, se ajusta sus anteojos y se queda viendo las morras de la página de espectáculos mientras llega su café, además de hacer tiempo hasta que alguien llegue al ministerio a presentar otra denuncia. Mientras, otros auxiliares atienden a varios automovilistas accidentados, ahí sólo fueron cinco muertos y tres heridos graves. La causa al parecer fue por que un borracho estaba tirado sobre la acotación de la autopista hecho que distrajo a los automovilistas en su veloz marcha. Ya sabe si bebe no se acueste a un lado de la autopista.
Días después los peritos presentaron dos líneas de investigación en relación a los diez cuerpos encontrados, el peritaje mostró orificios causados por proyectiles de armas de alto poder, pero posiblemente eso no fue lo que ocasionó su muerte: según la primera línea de investigación: fiebre aguda producida por el mosquito del dengue; de acuerdo a la segunda: Efisema pulmonar o cáncer debido, posiblemente, al exceso en el fumar de los fallecidos. Se levanta el acta y se archiva, siete copias y original, incluye fotos, pruebas y peritajes; la declaración de dos testigos también. Terminan las averiguaciones, los muertos no eran visitantes ni turistas, nadie presentará denuncia. Algo cotidiano para el ministerio público.
La seguridad en Guerrero está en que en el ministerio público hay averiguaciones previas archivadas.


  

No hay comentarios:

Publicar un comentario