I.-Inicio.
Ya
casi se cumple un año desde que inició el movimiento, con aquella
pequeña manifestación de un grupo de estudiantes, que pedían más
matriculas para la escuela a la que querían entrar. El problema era
simple: estos muchacho no alcanzaron a entrar a la escuela de su
preferencia, no porque no hubieran pasado el examen; sino por que
fueron los que menos contestaron, pero quedaron fuera sólo porque
también era un pequeño el número que aceptarían este año,
argumentando los directivos de educación: que ya existían muchos
profesionistas de esa carrera. El argumento al parecer en un
principio era suficiente sobre todo para aquellos que no estábamos
embebidos en la situación. El movimiento, al inicio, sólo consistió
en algunas marchas, que incluso se miraban raquíticas ya que los
muchachos no pasaban de veinte, sin embargo, así como ellos
iniciaron su movimiento, se les empezaron a unir jóvenes rechazados
de otras profesiones; con lo que ya después de algunos días, el
grupo creció y no sólo eran marchas lo que hacían sino que también
empezaron a efectuar bloqueos de cruceros. Los bloqueos estorbaban la
circulación de los autos, ocasionando el coraje de aquellos que
circulaban por la ciudad en automóviles y también de aquellos que
lo hacían sobre el transporte colectivo.
El movimiento fue creciendo; ya que a los que
solicitaban ingreso, se les sumaron los demás alumnos, aquellos que
sí ingresaron a todas las escuelas, para solicitar recursos para
mejorarlas. Esto fue gradual, primero una escuela y posteriormente
las otras hasta que terminaron siendo muchas; sobretodo aquellas
localizadas en las regiones rurales.
Parecía ser que aún con esta situación el movimiento
podría ser solucionado ya que en gobiernos anteriores ya habían
ocurrido casos similares y los habían resuelto, al menos
temporalmente. Las autoridades actuales, procediendo diferente,
consideraron que las peticiones eran absurdas, que el presupuesto y
las condiciones no permitían satisfacer las demandas; por lo mismo
las reuniones para concertar terminaban en batallas verbales,
rompiéndose las pláticas, sin lograr acuerdo alguno. Los
responsables de arreglar la situación argumentaban: que el
movimiento era ocasionado por fuerzas políticas antagónicas,
molestas por haber perdido el poder en las últimas elecciones.
Argumentos como éstos obligaban a los líderes de los partidos,
opuestos al gobernante, a emitir declaraciones que sólo ocasionaban
que el movimiento estudiantil se agrandara. Lo que informaba la
oposición, en sus declaraciones, era combustible para la hoguera;
porque ellos ya habían estado en el poder y sabían como y donde se
aplicaban los dineros. Ahora, como dije al inicio, después de un año
del movimiento éste ya no era manejado sólo por los estudiantes;
sino que paralelo a ese movimiento existía el de los maestros
luchando por salarios, este grupo, sumándose debido a las
declaraciones de diputados de oposición, quienes mostraban
públicamente los aumentos que los nuevos funcionarios se asignarían
a sus salarios, no importándoles los sueldos miserables de los
maestros, considerando los problemas de ellos ajenos al gobierno.
Por
otra parte los egresados de las normales luchaban por obtener plazas
motivados por argumentos que se publicaban en los diarios, sin ser
novedad, que ya de por sí eran rumores en la población, argumentos
como aquel de que muchas plazas de maestros estaban ocupadas por
aviadores
o que
otras las tenían
trabajadores administrativos en las oficinas.
Egresados de las universidades y de las normales
particulares; así como los de las oficiales se unieron al
movimiento, exigiendo, con sus peticiones, a que el gobierno aumente
las fuentes de empleo en el estado, exhibiendo el tremendo desempleo
que existe. Como represalia a los egresados de normales no oficiales
el gobierno desconoció sus estudios, argumentando que los dueños de
esas escuelas no tenían registro oficial; ocasionando un problema
aún mayor, todo debido a que con el desconocimiento, que hacia el
gobierno, los propietarios de las escuelas particulares, destaparon
una cloaca que ya existía tiempos atrás, cosa que afecto
directamente a los representantes del partido político derrocado.
Los que para contraatacar hicieron declaraciones, destapando las
corruptelas actuales, como por ejemplo: de aquellas compras
desmedidas que se hacían fuera de la entidad. Las declaraciones
unieron a todos los comerciantes locales, lanzando proclamas para que
el gobierno del estado hiciera sus compras en la entidad.
El
aumento en el número de plantones, marchas y choques entre grupos
antagónicos, a estas alturas, ya había desquiciado la ciudad; por
lo cual, los residentes se unieron, para colmo de males, haciendo
otra marcha, exigiendo a las autoridades seguridad y una
investigación a fondo de las ejecuciones que se iniciaron a partir
de la toma de posesión del gobernador actual. La seguridad era un
reclamo de toda la ciudadanía; inspirado, esto, en que cada día
existían balaceras entre la policía y delincuentes; o entre los
mismos malhechores, y aparecían, cabezas cortadas, tiradas en las
avenidas de la ciudad.
No
bastaban tantas manifestaciones para hacer que el gobernador se
interesara por los problemas, los mítines en la plaza pública eran
gritos en despoblado; como dijo una vez un manifestante: —ya
ven compañeros: sí existe la libertad de expresión, sólo que
nadie nos hace caso;
algunos de los funcionarios del gobierno, por su cuenta, al parecer
queriendo mantener su línea política, hacían intentos de
reconciliar, sin lograrlo. El gobernador por su cuenta no hacía
nada; o al menos era la sensación que se tenía por parte de los
observadores, incluso cuando alguno de los medios lo entrevistaba
contestaba con frases hirientes y que contrapunteaban a la población
como aquella cuando dijo preguntando: —Vamos
a ver ¿que padre quiere que un maestro con promedio de seis le de
clases a su hijo?
Sí uno lo toma a la ligera, con esta pregunta, hasta puede estar uno
de acuerdo, sin embargo: ¿acaso no el seis es la calificación
mínima aprobatoria?; entonces debe entenderse que dicho maestro, de
promedio de seis, sabe ser maestro; al menos en aquellas comunidades
donde el mismo Gobierno Federal
contrata estudiantes para dar clases, estos maestros deben estar
mejor preparados que los estudiantes de preparatoria. Indistintamente
de esta observación su declaración originó que en algunas
escuelas, las organizaciones de padres de familia empezaran a exigir
que se cambiaran a los maestros que no tuvieran un promedio mayor a
ocho. Cosa que hizo aún más crítica la situación.
Los lideres de los diferentes grupos optaron por unirse,
en un frente único, con un pliego petitorio amplio, claro y
fundamentado; asesorados por personas conocedoras que los orientaran,
de manera de no permitirle al gobernador tener salida evasiva en caso
de efectuarse una entrevista resolutiva. El representante del Frente
de Ciudadanos de Chilpancingo (FRECH) organizó la reunión,
convocando a todos los lideres a que se presentaran en uno de los
edificios del centro el jueves a las diez de la mañana.
II.-
Gu.
El
representante de los trabajadores salió temprano de su casa, desde
una de las colonias suburbanas de la ciudad, para dirigirse a su
oficina que se encontraba lejos del centro de la ciudad, hasta las
diez de la mañana sería la reunión, lo hizo caminando porque no
poseía auto, normalmente utiliza el transporte público pero en esta
ocasión, por los disturbios, no era conveniente su utilización, su
nombre: Gumaro Buendía Holgado, todos le decían “Gu”, un
personaje de baja estatura; panzón, sin ser obeso; mirada picaresca
como queriendo burlarse, y normalmente lo hace; metido en la política
como activista, por lo mismo tiene algunas averiguaciones previas,
sin embargo no parece ser que eso le preocupe; religioso, pero a
conveniencia, cree en la virgen de Guadalupe pero no se aviene a la
doctrina Católica, salvo en los ritos que se trate de festejar; buen
amigo, padre y marido; Aunque, como la mayoría de los de
Chilpancingo, platica sus aventuras amorosas; por lo cual se podría
sospechar que le es infiel a su mujer; empleado administrativo en la
SEG; aunque gana poco, cumple sus compromisos económicos y no se le
puede tildar de gorrón; por lo mismo es mil usos. Entre sus
actividades, fuera de ser burócrata, la hace de rotulista, plomero,
electricista y se une a cualquier actividad donde se requieran sus
servicios, con paga o sin ella. Es una persona acomedida y amable; le
gusta romper las conversaciones con frases chuscas o destruyendo
sarcásticamente lo que alguien habla con conocimiento de causa; le
gusta beber y no niega que sea borracho, ni le molesta que le digan
naco, da por hecho que lo es; juega fútbol y a pesar de su
constitución física y de sus 37 años no lo hace tan mal; su
preparación académica es limitada pero sin embargo trata de ser
mejor, incluso dice haber llevado algunos cursos dentro de su
trabajo; en plan serio, algunas veces, se pueden entablar
conversaciones interesantes con él, ya que su manera de pensar es
moralista y trata de lograr que las personas vivan mejor,
probablemente este conocimiento fue adquirido como experiencia de su
propia vida; se burla de sus males y de los males de quienes viven a
su alrededor, como puede va saliendo de ellos ya sean males
económicos o males de salud; se viste casi siempre informal, salvo
en ocasiones especiales donde se le nota con ropa nueva o casi nueva,
aunque nunca de vestir.
Ya en su oficina le pidió a la secretaria que le
avisara cuando estuviera cerca la hora para la junta, de manera que
él pudiera salir una media hora antes, para asegurar estar presente
sin falta. Mientras, ordenaba todos los papeles donde llevaba las
palabras necesarias que decir y todas las peticiones de su gremio;
acompañadas por toda la sustentación necesaria para respaldarlas.
III.-
Bueno.
Mientras
en otra parte de la ciudad, saliendo de una colonia más céntrica y
de un nivel económico mayor, se dirigía rumbo a la junta; en un
auto, de esos enormes, tipo camioneta de pasajeros, muy de moda, de
marca americana; el presidente de la
asociación de padres de familia, Gudencio Cabañas Bueno, era una
persona de baja estatura; ojos grandes, como si estuvieran flameado;
tez blanca, como que si nunca le hubiera pegado el sol; bien peinado;
siempre con apariencia pulcra; ropa bien planchada y tradicional,
nunca sport y mucho menos de moda reciente; soñador, siempre
hablando de grandes negocios o de futuras influencias con políticos
que puedan llegar al poder; participa en las campañas políticas
pero no es político más bien es perro;
divorciado y juntado con otra mujer; es buen
padre, cumplidor con los hijos de las dos mujeres, al menos eso
platica su mujer actual; no es de confianza, dado que tiende
aprovecharse de las personas que tienen recursos económicos y de
los que viven a su alrededor; está convencido de que sólo siendo
corrupto se puede triunfar ”el que tranza avanza”; profesionista,
aunque no consta, sólo porque el dice que es contador y porque ha
desempeñado trabajos relacionados, aunque nunca dura mucho en dichos
puestos; no se sabe con exactitud si tiene o no tiene dinero; pero es
ostentoso, aunque luego debe las renta de la casa donde vive y lo
desahucian, no se le conoce ninguna propiedad que haya tenido para
vivir; los negocios que a emprendido siempre terminan por quebrarlo y
dejarlo en la ruina, a veces, no sólo a él sino que a todos los que
lo apoyaron; se puede platicar con él de temas contemporáneos, pero
toma posición; además tiene el defecto físico de no oír bien al
menos que encienda su aparato de sordera, cosa que aprovecha para
decir que no oyó lo que no le conviene.
En
el camino pasaría por otros miembros del comité de padres de
familia, llevaba muy buen ánimo; ya que juntos, los del comité,
lograron redactar un documento que consideraban perfecto y
contundente para la solución de su parte en el conflicto.
IV.-
Próspero.
En
un edificio del centro, a sólo unas cuadras de donde se reunirían
todos los involucrados en el movimiento, sentado frente a su
escritorio; de esos que parecen campos de fútbol, por el tamaño,
hablando por teléfono, sonriente y optimista; más por todo el
embrollo que le estaban ocasionando al gobernador; que por lo
planeado para la reunión, el líder de los empresarios, Próspero
Abarca del Piero, moreno de facciones negroides; de estatura baja y
de complexión obesa, aunque bajo la grasa se muestra fuerte por las
características físicas de su trabajo de carpintero; su rostro, al
verlo, nos da la idea de que está molesto, aunque no siempre lo
esté, es difícil verlo sonreír aunque cuando recibe dinero se le
nota su alegría; es un buen amigo, aunque no puede evitar su gusto
por el dinero, por ese deseo desmedido fracasan sus relaciones
amistosas; es bondadoso con los que están necesitados, pero tarde o
temprano, si ve que la persona a quien ayudó tiene dinero o
posesiones tratará de cobrarle, sin decírselo, pero terminará muy
molesto si el otro se niega, convirtiéndolo en su enemigo; es buen
padre y marido, aunque como buen mexicano, infiel, no lo he
comprobado pero ya sea para presumir, o porque es verdad, él lo a
dicho, además, como muchos, piensa que así debe de ser; es gregario
y comúnmente vive en grupos familiares, aunque por su naturaleza de
líder termina enemistándose, aún con sus familiares, cuando éstos
se inconforman con sus actitudes, lo anterior también sucede dentro
de las organizaciones a las que pertenece y a donde llega a liderar,
terminando por quedar sólo debido a sus imposiciones, que aunque no
siempre son erróneas si llegan a ser impopulares, más aún con los
manejos del dinero, que nunca los hace transparentes y cuando lo hace
resultan ser mentiras comprobables; en su oficio es sumamente hábil,
aunque siempre busca sacar ventaja del cliente, lo que hace que sus
trabajos no siempre muestren la calidad que el puede darles, en lo
que hace, considera que ahorrar materiales y procesos son la manera
en que él es más bueno, sin considerar que lo anterior pueda mermar
la calidad del producto final; es una persona inteligente pero sin
cultura amplia, puede construir muebles de una complejidad elevada
aunque siempre tiene que tener un modelo para copiar ya que no es
creativo y su talento para lo artístico es bajo, cuando habla de
proporciones se refiere a lo aprendido en relación a las medidas
ergonómicas y
no a las de las artes plásticas; le gusta el fútbol, y como muchos,
de por aquí, le va al América, porque piensa que, como este equipo
fue muchas veces campeón, uno debe estar con los ganadores y así
automáticamente uno es ganador, por eso cuando pierde ese equipo se
deprime y se pone de mal humor; cuando practica fútbol él forma sus
equipos y sí se encuentra en uno que él no formó, con respeto,
siempre trata de influir en la dirección, en sus equipos siempre
trata de que ganen, para él ganar es la razón de jugar, incluso,
contrata para las liguillas jugadores “estrellas”, él participa
jugando pero casi siempre prefiere la función de director técnico,
sabe mucho de fútbol pero siempre es del modo en que lo hacen los
cronistas de televisión, no es creativo, sólo imita por eso se
opone cuando alguien quiere ser diferente, utiliza el fútbol para
posicionarse dentro de la sociedad invitando a juegos especiales a
personajes importantes de diferentes estratos de la sociedad y de la
política, de los que posteriormente pretende sacar provecho;
lográndolo en muchas ocasiones; económicamente es una persona de la
clase media baja, se puede decir, por su forma de vivir; aunque sus
ingresos pueden en algunos años rebasar los mejores de Chilpancingo,
pero por su manera de ser, el dinero poco le dura en las manos,
generalmente lo gasta aunque gran parte logra colocarlo en bienes que
posteriormente puede convertir en efectivo, cuando lo necesita, por
eso es común verlo con autos nuevos, sin autos o con autos viejos,
que tiene terrenos o que no los tiene; le gusta festejar los
cumpleaños de su esposa, de sus hijos y el propio, los festejos son
tan grandes como su economía lo permita en el momento que los hace,
siempre invita a los personajes de la ciudad que más cercanos a él
se encuentran, así como a sus familiares y aquellos a los que trata
de usar en su beneficio, esto último, lo de usar, no lo niega; sin
embargo no se sí sólo a mí me lo a dicho, pero sino, es increíble
como puede sacar provecho de alguien que sabe que se lo están
sacando, probablemente los políticos lo permiten por reciprocidad,
los demás por seguirle el juego y que les siga invitando a jugar
fútbol, ya que, aunque no malo, este deporte puede ser un vicio.
Se preparaba conversando con su asesor, quien ya lo
había tranquilizado, asegurándole que el gobernador tenía que
ceder a sus peticiones o se vería en la penosa necesidad de
solicitar licencia.
V.-
El Ateo.
Desde muy temprano se podía oír el bullicio en los
pasillos exteriores de los edificios del centro, en donde muchos
jóvenes que participaban en el movimiento y que no residían en la
ciudad se quedaban a vivir, empezaban a levantarse, se organizaban en
grupos para levantar el campamento e iniciar las labores de preparar
el almuerzo; uno de ellos, es el que dirige a los alumnos rechazados,
Pedro Sánchez Tinoco: un joven inteligente, pero por lo mismo
estudia poco; entiende fácilmente lo que le explican y algunas cosas
las deduce sólo con observarlas; a sus 18 años aparenta
veinticinco, por lo que sus compañeros lo siguen como líder; aunque
desdeña los libros de texto, lee bastante más de lo que personas de
su edad lo hacen; le gustan los deportes, y debido a su constitución
atlética es bueno en los que practica; de un metro setenta y siete
de estatura y setenta quilos de peso, delgado, sin grasa y correoso;
bien parecido, por lo que las muchachas también lo siguen como
líder, más por eso que por lo que pueda él decirles; llegó de un
poblado fuera del estado, pero, desde la preparatoria, aquí a
estudiado; soltero; poco afecto por hábitos como el alcohol y el
cigarro, las drogas prohibidas le atemorizan ya que siempre está
pensando en su salud; soltero; no sabemos como la obtuvo, pero tiene
una beca de una organización internacional de la que poco habla,
algunos más allegados a él dicen que sí la tiene; moreno claro;
de ojos verde olivo; de origen pobre; sin embargo, siempre a estado
relacionado con personas intelectuales quienes lo han ayudado a
formarse; poco religioso al grado tal que le dicen “El Ateo”, sin
embargo trata a sus semejantes con respeto; habla con voz grave y
clara, pero aunque se oye nítida y fuerte no se mira que grite; ante
el micrófono es un orador consumado y convincente; le gusta tocar
guitarra, lo hace magistralmente por el puro gusto de escucharse.
Había presentado el examen de admisión a la Normal, pero por no
darle la importancia necesaria obtuvo bajas calificaciones, desde
niño a tenido el deseo de ser maestro, por sus cualidades, podría
ser uno muy bueno.
Dejando que las comisiones fueran organizadas por otro
de los activistas, Pedro, se concentró en ordenar, escribiendo en
una hoja de papel, lo que durante la noche, todos los afectados
decidieron; no era mucho, por parte de los rechazados, sólo ser
aceptados incondicionalmente y suspender las ordenes de aprensión
que existían en contra de ellos; además aprovechando lo caldeado
del movimiento habían acordado agregar: que si terminando el primer
semestre lograban promedio de ocho o más deberían otorgarles una
beca como compensación al tiempo dedicado a la lucha, ya que esto no
debió de ser si el gobierno desde un principio hubiera actuado
constitucionalmente.
VI.-
Pillo.
A orillas de una de las calzadas más importantes de la
ciudad, se encontraba la residencia tipo californiano, del líder del
FRECH, donde ingiriendo un suculento almuerzo se encontraba: ni
emocionado, ni preocupado, ni mucho menos precipitado, Felipe Alarcón
Guevara a quien todos lo conocían con el apócope de “Pillo” por
lo de Felipillo, al principio de cariño; después por maliciosos.
Nació en esta ciudad, y siempre a dicho que su familia fue una de
las fundadoras de ella; de tez blanca, que tiende a enrojecer por
cualquier motivo; fuma puros; tiene estudios profesionales de
abogado, la población lo considera un licenciado habilidoso, pero la
mayoría de sus colegas lo dudan, aunque reconocen que escribe muy
bien, pero consideran que sabe poco de leyes; amable en su trato y
exageradamente educado al grado de verse cursi; alto; rollizo, con
una panza sobresaliente; siempre ve de frente, como viendo el
horizonte; amante de la ciudad; activista de la poesía, al nivel de
encabezar a un grupo de poetas que se reúnen regularmente, es buen
orador, sus poesías, aunque gramaticalmente son buenas, no tienen
creatividad y son pedantes; se cree historiador pero sólo sabe la
historia oficial y los mitos locales, ya que no es investigador, pero
tiene buena memoria; habla de fechas con mucha facilidad y recuerda
muchos nombres; presume de ser amante de las tradiciones locales,
pero sin embargo vive en una casa estilo californiano y utiliza todas
las comodidades modernas, prefiere la ropa extranjera que la
nacional, incluso su comida la compra en la ciudad de México en una
tienda de alimentos importados.
Antes de terminar sus viandas llamó
a uno de sus ayudantes para que preparara el auto, aunque sólo eran
unas cuadras al lugar de la reunión, a Pillo no le gusta caminar así
es que se dirigiría al centro en auto, su ayudante salió e inició
a lavar y limpiar por dentro el auto; sabía, de antemano, que si no
estaba impecable recibiría un regaño implacable. Mientras, Pillo
terminaba con calma sus alimentos, posteriormente, dirigiéndose a su
inmensa biblioteca le pidió a su secretaria que le diera la carpeta
del movimiento, después, prendió un puro y se dirigió, metiendo la
carpeta a su portafolio, a la cochera, donde ya lo esperaba su chofer
con el auto listo para partir.
VII.-
Los Otros Géneros.
La
noche anterior, a la junta, apareció muerta una mujer en las
inmediaciones de la ciudad, que había sido secuestrada días
anteriores junto con su hijo al que un día anterior ya habían
liberado; este hecho, provocó que organizaciones femeninas se
unieran para protestar por los asesinatos de mujeres, exigiendo mayor
seguridad, a los tres niveles de gobierno, a estas mujeres se le
unieron las madres solteras, ya que una alumna fue rechazada por que
se rumoraba que estaba embarazada; sin siquiera hacerle los análisis,
o al menos corroborarlo. También se les unieron las mujeres
campesinas; que se encontraban ofendidas, argumentando: de que por
ser indígenas les daban despensas con alimentos descompuestos.
Cuando el grupo de damas se encontraban en la plaza central, el líder
del FRECH se dio cuenta de sus protestas y las invitó a la reunión.
En la plaza también encontró que otro grupo realizaba protestas en
apoyo de los alumnos rechazados, era el grupo por el Orgullo Gay,
quienes se encontraban molestos debido a que decían que algunos de
los rechazados fueron sujetos de discriminación debido a sus
preferencias sexuales; Pillo sin argumentar nada sólo se acercó al
que parecía ser el líder y lo convidó a presentarse a la reunión
diciéndole que el fin principal de ésta era el de que todos
hicieran un frente común ante las autoridades.
VIII.-
La Reunión.
La
reunión aún no iniciaba, ya habían llegado la mitad de todos los
representantes invitados, acababan de dar las diez y media de la
mañana, como se había previsto, conociendo la impuntualidad local,
la hora de inicio estaba considerada para las once, mientras
esperaban a los demás, los asistentes junto con los asesores, que
también ya estaban presentes, comenzaron a elaborar un orden de día
en la que incluirían los siguientes puntos a tratar:
Escuchar a cada una de las partes en disputa
cediéndoles cinco minutos para sintetizar sus peticiones.
Nombrar una comisión para que se encargue, junto con
los asesores, de agrupar los problemas en bloques de importancia, de
manera que no se complique, en una maraña de datos, la lucha.
Determinar una fecha para exigir a las autoridades una
audiencia resolutiva plenaria y pública.
Sentado en la mesa donde se
preparaban para iniciar la reunión, Pillo inició; pidiéndole, a
los tres más que se encontraban con él, que se anotaran en el libro
de acuerdos, solicitándoles que apuntaran todos sus generales. Así
lo hizo: Gu, Bueno y Prospero, y con anterioridad, a pasar el libro,
Pillo lo había hecho. Ya eran las once cuando el líder del grupo de
Orgullo Gay entró, “La More” era su nombre de batalla, aunque en
sus generales puso: Antonio Moncada Alarcón. Lo siguiente no lo puso
en los generales pero lo diremos para que sepan como era: moreno; de
mediana estatura, cuerpo varonil; bien parecido, nariz recta, labio
inferior carnoso, barba partida ligeramente; cejas depiladas y
pestañas rizadas; al grado tal que las mujeres del lugar decían
que era un desperdicio de hombre; muy educado; bien hablado, con vos
muy varonil, dejando, de vez en cuando, salir sus tendencias
femeninas; bien vestido incluso muy masculino y pulcro; sin hacer a
un lado lo perfumado, con colonia para hombres marca Chanel. Se
dirigió a la mesa con movimientos delicados sentándose al lado de
Pillo diciéndole (cantadito): —ya
llegue grandote.
Pillo le contesta (chiviado):
—que bueno porque ya vamos a iniciar.
IX.-
La Güera.
Se fue, con un hermoso de Andaluz
Regresó, y después de nueve meses
La
preciosa, dijo divertirse a veces
Pero ahora, ésta, tiene que dar a luz.
El epigrama sólo es la pequeña historia de “La
Güera”, que es como conocen a esta Madre Soltera, cuyo nombre
verdadero es el de Leticia Salgado Almazán, que entraba justo en el
momento de iniciar la sesión y que era la representante de las
mujeres que protestaban por causas que ya mencionamos y que seguiré
diciendo posteriormente. Esta señora muy respetada por cierto; a sus
veintinueve años, también hermosa, bien arreglada, gracias a su
buen gusto y a que económicamente es muy solvente; esto último
porque heredó, de sus padres, muchos terrenos los cuales, debido al
crecimiento de la población, han subido considerablemente de precio.
Sin embargo le falló el hombre de quien se enamoró, aquel español
que la embarazó y posteriormente la abandonó, por eso está soltera
y con un hijo; que ya en este momento tiene doce años. Defiende a
las mujeres en todo movimiento feminista y por lo mismo siempre
termina liderándolas; se habla de tú con todos, sin importar
jerarquías; se lleva pesado, sin ser grosera y sobretodo sin
permitir que la ofendan u ofendan alguna otra mujer. Se dirigió a la
mesa saludando en voz alta a todos y sentándose inmediatamente en
una de las cabeceras; donde Prospero le dio el libro, indicándole
que apenas estaba por iniciar la reunión y que se anotara, que ya
los demás lo habían hecho.
Terminaba la Güera de anotarse cuando, Pillo,
auto-nombrándose moderador inició la reunión, leyendo el orden del
día, que ya mencioné.
Preguntó a todos los presentes si alguno quería
iniciar; cuando, desde la puerta, Pedro, que apenas llegaba, se
incluyó como primer orador; sin que nadie se opusiera, se dirigió a
la mesa jalando la silla que estaba entre Bueno y Prospero, y sin
sentarse inició su discurso:
—Vivimos en uno de los estados más atrasados en
cuestiones de educación, probablemente el último de la lista,
tenemos comunidades que no tienen escuela y que incluso no están ni
siquiera en la lista de tener una, probablemente... la población de
esas comunidades ni siquiera saben que significa la palabra escuela;
¡sin embargo...! tenemos un Congreso del Estado y un Concejo Estatal
Electoral que reciben...!Millones de pesos¡ Manteniendo estas
instituciones, sólo con el fin de justificar a los gobiernos en
turno, dejándolos que manejen presupuestos millonarios como si
fueran propios; no faltan cincuenta maestros en el estado; sí no que
muchos más, sin embargo, nos impiden estudiar para profesores con el
pretexto de que ya somos demasiados— poniendo
papeles, que se encontraban dentro de una carpeta, sobre la mesa;
siguió diciendo —en esta carpeta están
escritas todas las pruebas: de cuantas escuelas en el estado existen
incompletas en maestros, cuantas sin maestros y cuantas comunidades
que requieren escuela no la tienen, también está todo el dinero que
se desvía en ese sector y que alcanza para contratar a los maestros,
e incrementar el número de matriculas en las normales o incluso
hacer una nueva, dinero que alcanza incluso para las construcciones y
todos sus equipamiento y sueldos de maestros— terminó
diciendo —eso es todo, ahí dejo la carpeta
para que junto con todo los argumentos de los demás, los usemos para
fortalecer el movimiento y lograr la mejor solución—.
Pillo ya considerándose líder, le contestó —bien
pedro así se hará—
X.-
El Gordo.
Con
su flema característica, el líder de los estudiantes, almorzaba:
carne enchilada,
con atole
champurrado, tamales
de hoja de plátano, su madre le preparaba unas memelas
a mano, para que acompañara la carne; en medio de la mesa en un
molcajete tenía
salsa de tomate verde y en otro salsa roja de chile guajillo, en
medio de los dos molcajetes un queso fresco, tipo costeño, de los
que se elaboran, aquí mismo, en la ciudad. Vista la mesa desde
arriba semejaban, los colores de los alimentos, la bandera; como para
recordarnos que esa comida es mexicana; sin embargo, debido a la
infiltración gringa, discretamente, también se miraba la
acostumbrada botella familiar de ese refresco negro. “El gordo”,
como le decían todos los que lo conocían; y algunos que no,
también, por su figura rolliza, en una mano tenía un taco
de queso con salsa roja mientras masticaba un pedazo de carne
enchilada. Ya eran las diez y él todavía
estaba en pijama, su madre le repetía con cariño:
—Apúrate
gordito que ya son las diez—
Él
sólo le contestaba: —sí mamá.
Así
se encontraba Agustín Adame Osorio un joven de diecinueve años;
como de uno noventa de estatura; rechoncho, como de 120 Kg.; joven
muy inteligente, en la primaria fue el abanderado y de los que
fueron a visitar al presidente con las mejores calificaciones;
católico, muy religioso, asiste a misa todos los domingos acompañado
de sus padres; nació en esta ciudad y es muy apegado a las
costumbres locales: ir al pozole los jueves, sábados y miércoles,
los viernes a los mariscos, los domingos al fiambre, los martes al
mole calentano; no falta, a la misa, los domingos, claro está, yendo
antes al mercado para comer barbacoa
de chivo. Asiste a los velorios y reza el rosario, etc; es
emprendedor, seguido organiza eventos para recaudar dinero. No le
preocupa su gordura ya que desde bebé así ha estado; por su tamaño
no consigue, aquí, ropa de su talla, de ahí que una vez al año
acuda a Los Ángeles, EUA, para comprar su guardarropa; podría
mandárselo hacer aquí, con uno de tantos costureros que hay, pero
como él la prefiere de marca opta por realizar lo antes mencionado;
le gusta burlarse de los demás, sin intención de lastimar sólo por
diversión; habla bien, claro y con elocuencia; lo siguen sus amigos
porque es indulgente con ellos, además de solidarizarse con sus
problemas; económicamente es solvente, aunque aún estudia; comparte
sus posesiones con sus compañeros de escuela, reuniéndose con ellos
para hacer los trabajos escolares juntos, permitiendo que éstos se
realicen en su casa, donde su madre lo apoya, incluso dándoles de
comer a todos.
El
gordo, que llegó a medio discurso de Pedro y que se encontraba
parado en la puerta escuchando, se dirigió a la mesa, se detuvo, sin
sentarse, a un lado de Pillo, en el asiento que quedaba vacío, dijo:
—
¿supongo, ya qué no he leído el orden del día,
que está en él incluida la formación del comité que dirigirá
esta asamblea?—.
Pillo
pasándole la hoja, donde se escribió el orden del día, señalándole
el punto dos le dice —como ves todo está
meticulosamente preparado—
—Ya
lo veo, ¡muy meticulosamente!, Sr. Alarcón—
contesta el Gordo —solamente le agregaré
¡que aquí! nombraremos entre todos quien dirigirá a este grupo—
mirando, fijamente a Pillo, termina
cuestionando — ¿correcto?—
Pillo
sólo responde: —correcto—.
Dirigiéndose,
Pillo, a todos pregunta: —
¿quien sigue?—
XI.-
Exposición de Motivos.
Próspero,
desesperado por quererse salir y regresar a su empresa, pidió el
turno:
—quisiera ser yo el siguiente.
—
¡Adelante!— previendo la
necesidad, le
contestan en coro todos.
Próspero
habla de la siguiente manera:
—El
gobierno estatal niega la compra de insumos y servicios a las
empresas de la entidad con el argumento de que nuestros precios no
son competitivos; sin embargo... comprando fuera del la entidad, no
dice, que el gobierno estatal deja de percibir los impuestos que
generan esas compras, limitando con ello recaudación, ya que esas
empresas que les venden no contribuyen en este estado; tampoco dice:
que esas empresas no contratan personas de la entidad como empleados,
evitando con eso disminuir el desempleo— continuando,
afirma Próspero —además en algunos rublos
de sus adquisiciones, nuestros precios están muy por debajo de
aquellos con que el gobierno ha adquirido en otros estados, condición
que origina sospecha de actos corruptos en la entrega de las compras
al hacer las licitaciones, de lo que he dicho, en este sobre se
encuentran pruebas de mercancía facturada fuera del estado a precios
superiores a los facturados por tres empresas del estado— terminó
diciendo —Quiero agregar el siguiente
argumento:— diciéndolo en voz alta: —
a pesar, de qué,
constitucionalmente es obligación del
estado apoyar a las empresas. —
Continuó: —Nunca
progresarán las empresas del estado, si el gobierno es su peor
adquisidor y su mejor atacante, esto debido a que no nos compra y por
otro lado nos ataca con mentiras en los medios. En el sobre incluyo
grabaciones de la radio y la televisión donde ofende el gobernador a
los empresarios locales. —
Entregó
el sobre a Pillo, y disculpándose se retiró, diciendo que en los
puntos siguientes de la orden del día él acataría lo que los
demás votaran. Pillo recibió el sobre mostrándolo a los demás y
al mismo tiempo preguntando quien quería continuar.
La
More, mirándolo directamente a los ojos le dice:
—Voy
yo compañeros, permítanme ser quién continúe, — mirándolos
a todos y haciendo un giro con la cabeza como barriendo toda la mesa,
pregunta: —¿están de acuerdo?... — Pillo
le contesta: —está bien Toño, sólo quiero
decirles, que queda como último punto la creación de la mesa
directiva de este comité, esto es por petición de Pedro. Bueno ya
les informé y... ya puedes continuar... Toño.
Sonriendo
La More y mirándolo con ojos dormilones le contesta: —gracias
pillo... pues bien compañeros y compañera— hablando
con tonadita afeminada — yo sólo quiero...
que todos ustedes y las demás personas que viven en esta ciudad...
entiendan que lo que nosotras las personas hagamos en... ¡Nuestra
intimidad!, no deberá ser razón suficiente y necesaria para que nos
descalifiquen al momento de escogernos para entrar a la escuela o
para seleccionarnos en un trabajo, ni para ningún otra cosa en donde
lo importante deba ser nuestra preparación académica o nuestras
habilidades, y que estas dos últimas cosas, son antes que cualquier
otra razón fútil y vana, ¡ya basta! de homofobias
descaradas y malvadas, somos humanos como todos ustedes, permítanos
vivir igualmente. Muchas gracias y ahí dejo en esa carpeta nuestros
reclamos... eso es todo pillo... que siga el que siga.
—Así
se hará Toño— le contesta pillo, y
pregunta: — ¿quién quiere seguir?
Gu
parándose, haciendo hacia atrás su silla: —permítanme
ser yo quien continué.
Todos
en coro: — ¡claro!
Acomodándose
el pelo y carraspeando, Gu, inicia su exposición de motivos:
—Compañeros y compañeras que se encuentran
aquí presente, es para mi motivo de orgullo representar a la clase
trabajadora democrática de guerrero, quiero agradecer a todos
ustedes el que me hayan permitido exponer, ante esta magna asamblea,
nuestras inconformidades, así como también nuestras propuestas, me
he permitido anotar en este legajo de papeles cada uno de nuestros
puntos de negociación, para que ustedes los utilicen de la mejor
manera; también quiero, aprovechando esta tribuna que ustedes tan
amablemente me ofrecieron, para decirles que los trabajadores
administrativos no ocupamos plazas de maestros; que sí existen
maestros trabajando como administrativos, pero la plazas son
administrativas, también queremos aclarar que todas esas consignas
que han lanzado en contra de nosotros no son culpa de la base
trabajadora sino que de los empleados de confianza que cambian con
cada sexenio, también si me lo permiten quisiera aclarar que ya
llevamos muchos años percibiendo salarios muy por debajo de los
trabajadores administrativos de otros países, también agregaré
que cada día nuestras prestaciones se han visto mermadas como por
ejemplo aquella de los servicios médicos, que nos descuentan
quincena tras quincena; pero que sin embargo, algunos empleados han
llegado graves a los hospitales donde por anticipado ya pagamos y no
los reciben, porque argumentan que no tienen cupo o los recursos no
les alcanzan y algunos que sí son aceptados son tratados como
mendigos —jalando aire y volviendo a
carraspear, termina diciendo, ya sentado:
—aquí les dejo el legajo. Para terminar, sólo quiero exponer que
aunque nos critican que somos flojos, quizás porque algunos, los
menos, lo sean; siempre se ha sacado el trabajo oficial y la muestra
es que todos los ciudadanos logran obtener la documentación que
requieren... Muchas gracias.
—Otro
más— propone Pillo.
El
Gordo, dándole una palmadita a pillo en el hombro, le dice: —sigo
yo.
Pillo
le voltea a ver, luego mirando al resto, mostrando las palmas de la
mano, como pidiéndoles su anuencia le contesta:
—adelante.
El
gordo se pone en pié y empieza hablar: —durante
años las autoridades nos han dicho los millones que se gastan en la
educación, en el discurso siempre dicen, que es en la educación
donde se aplica, sin embargo si uno se va a los papeles nos daríamos
cuenta que gran parte del dinero se gasta en los derroches de los
funcionarios del primer nivel, obviamente que de los que trabajan en
este sector, que es la educación; sin embargo, ese gasto es
superfluo, dado que no beneficia a la educación... cómo lo sería,
sí ese dinero se gastara en algo más orientado a educar. Ya Pedro,
entregó documentación donde muestra parte de ese derroché; y yo,
traigo más, que entrego en este momento para su evaluación y para
incrementar la información que sirva de una vez por todas para
obligar a que los que gobiernan dirijan a donde debe ser, el dinero,
y no sólo disfracen el uso, de manera tal que esa camarilla de
corruptos se lo queden. Por otra parte queremos indicar que las becas
deben dárseles a aquellos estudiantes que la merecen y no a los
parientes y amigos de quienes las reparten, para evitar esto
proponemos que las listas que hagan sean valoradas por comités
formados por alumnos en cada escuela— hace
un pequeño silencio como para tomar aire; y continúa
—otra de las peticiones, que hacemos, es la de que ya dejen de
hacer escuelas con instalaciones ostentosas, sólo para cuestiones
propagandísticas, mientras a otras no les toca, en algunas
ocasiones, ni maestros, también que dejen de construir grandes
conjuntos educativos con fines políticos y después los abandonen a
su suerte, como lo han hecho con muchas escuelas rurales, que
posteriormente resultan incomodas para el que gobierna debido a las
peticiones que con derecho solicitan. Es claro que si uno se inscribe
a una escuela la intención es de ser gente útil al país, sin
embargo las deficiencias del alumno acompañadas de las deficiencias
de las escuelas hacen que seamos vistos como estorbos o problemas
para el sistema. Si las escuelas se planearan de acuerdo a las
necesidades de los alumnos y del país, y no a las necesidades de
ingresos para los que gobiernan, saldríamos más preparados,
seríamos más los que fuéramos útiles al progreso del país y no
solamente saldrían, como ahora, muchos parásitos que se prenden del
instrumento gubernamental para vivir de él. Es todo lo que tengo que
decir, lo demás está bien fundamentado en los papeles que entrego.
Poniéndose
de pie, La Güera, empieza hablar: — ¡yo
pensé que este gordo se la iba pasar hablando todo el día!, si me
permiten, quisiera ser quién exprese ahora mis puntos, yo sí seré
breve...
Todos
salvo La More se quedaron mudos desde que La Güera se puso de pie,
ya que el movimiento que hizo al hacerlo permitió que se dieran
cuenta del atuendo que traía, que consistía en una faldita pequeña:
por arriba, a la cadera; por abajo, a medio muslos, de blusa traía
sólo un pequeño trapito que por abajo dejaba ver todo su magnifico
y plano vientre, desde el pubis donde terminaba la falda hasta unos
centímetros encima de un bien formado ombligo, el movimiento de sus
senos amenazó con romper la blusa ya que por arriba de ellos quedaba
un gran escote, cosa que hizo que los hombres presentes quedaran
paralizados y mudos viéndola. Sólo La More, por su condición
homosexual, no la miraba ya que él no perdía de vista a Pillo,
celoso por lo que sucedía.
La
Güera, para despertarlos, que les dice: —Contesten
bola de babosos, ¿que nunca han visto una vieja?
Tartamudeando,
Pillo, contesta: —bi...bi...bien continúa
tú, Güe... güerita.
—Gracia,
papito— le dice, melosamente, continuando
con lo siguiente: —Nosotras
las mujeres queremos exigir al gobierno que aclare los casos de
mujeres muertas, en el estado, que haga transparente la información
del número de mujeres asesinadas y que deje de ocultar o mentir al
respecto; también exigimos que se respete la equidad del género en
el número de matrículas escolares, ya que en ocasiones, rechazan a
las mujeres pretextando un embarazo, situación que no tiene porqué
presentarse ya que el ser madre no le impide a las mujeres quererse
preparar mejor para sacar adelante a sus hijos. También incluyo en
nuestros reclamos que exista seguridad para todos, aquí sí:
hombres, mujeres, niños y ancianos... Yo no preparé, por falta de
tiempo, nada escrito, pero tengo algunos documentos donde se muestra
como el gobierno miente, en las cifras, éstos te los traigo en la
tarde, Pillo.
Bien
Güera— responde,
Pillo, y sigue hablando —ahora
que tocaste, lo de la seguridad, quiero decirte que ese es un tema
que los del frente de Chilpancingo estamos exigiendo, enérgicamente,
por lo que yo ya lo tengo todo documentado... Al respecto, también,
y es todo lo que diré como mi presentación, vamos a exigir a los
tres niveles de gobierno que atienda: todos los problemas, donde
existan protestas públicas, desde el primer día que sucedan, debido
a que la población está muy molesta con estas manifestaciones, no
con los grupos que las hacen, sino que con las autoridades que
disimulan no corresponderles el problema y se la pasan echándose la
bolita entre ellas.
—Ahora
parece ser que sólo queda el Sr. Bueno, ¿si quiere empezar?...
Adelante.
—Sí
desde luego que sí... —
Contesta, el Sr. Bueno —Yo
creo que en las presentaciones y la documentación que traen los dos
jóvenes estudiantes que ya hablaron, quedan contenidos nuestros
reclamos, sólo quiero también unirme—
continúa diciendo el Sr. Bueno —a
la petición del Sr. Felipe; con relación a que sean atendidos en
sus reclamos desde el primer día, ya que así, cuando los maestros
hagan paros, se evitaran las perdidas de clases, como está
sucediendo ahora. No es un secreto saber que los maestro están
siendo afectados en sus condiciones de trabajo, porque no sólo son
ellos los afectados, sino que somos todos los empleados, parece ser
que ahora sólo son beneficiadas las elites gobernantes y los grandes
empresarios multinacionales. Parece ser que a los gobernantes, no les
interesamos, o solamente les somos, para votar. Eso es todo.
XII.-
El Comité.
Pillo
tomando un buen buche de aire y después sacándolo les dice:
—continuamos
con el siguiente punto del orden del día. Qué es el de nombrar
quien dirigirá todo el comité, y como se formaran las comisiones de
evaluación. Yo considero, que me permitan a mí junto con los
asesores hacer la evaluación.
La mayoría contesta que sí.
El
Gordo, reclama y les dice:
—yo considero que deberíamos nombrar de todas maneras el comité y
que el Señor Felipe se encargue de la evaluación.
Está
bien dijeron todos. Pedro propuso Al Gordo como presidente, y dijo
que él mismo fuera quien escogiera al resto del comité, todos
aceptaron.
El
Gordo nombró al comité de la siguiente manera:
Presidente.- El Gordo, Agustín Adame Osorio.
Tesorera.- La Güera, Leticia Salgado Almazán.
Secretario.- El Ateo, Pedro Sánchez Tinoco.
Vocal.- La More, porque le pidió al Gordo: que aunque
fuera de vocal el quería estar en el comité. Antonio Moncada
Alarcón.
Una
vez quedado formado el comité y aceptado por todos, también las
comisiones, Pillo y los asesores dando una pequeña hojeada a los
papeles (éstos, a la mayoría los había invitado Pillo), concluyen,
y dirigiéndose a la asamblea dicen por medio de Pillo: —creo
que por lo menos nos tardaremos una semana, que les parece sí
hacemos una tregua; mientras, suspendemos las barricadas, las
manifestaciones y las marchas, y en una semana pedimos una reunión
con las autoridades.
El
Gordo reclama: —se
me hacen muchos días, se va a enfriar el movimiento.
—Bueno—
calma Pillo —que
sean tres días.
No de muy buena gana, pero para no verse radical, acepta
El Gordo.
Se despiden todos.
Pillo, también, despide a los asesores cuando se da
cuenta que todos se retiran, y regresa a su casa.
XIII.-
Epilogo.
Ya en casa, Pillo, prende un puro y se dirige a su
despacho, en donde, frente a un escritorio y sentado en un sillón,
marca un número telefónico.
Se
escucha su voz que dice: —Comuníqueme
con el gobernador, por favor...
Del
otro lado de la línea: —de
parte de quien.
Contesta:
—del Licenciado
Felipe Alarcón.
Otra
vez:
—Un momentito...
Después
de unos minutos le responden:
—Que tal pillo
Pillo
contento expresa:
—Hecho mi gover,
¡ya está, despejado todo para la ceremonia donde viene el presi!
Le
contestan nuevamente:
—Bien Pillo, no
olvides mandarme tu recibo de honorarios por lo que acordamos.
“Mientras
tanto, en la mente, de todos los lideres y liderados del movimiento,
existe la esperanza de solucionar sus inconformidades; sin darse
cuenta que sólo son piezas en el juego del poder”.
2 de diciembre del 2006
Edgar Pavía Miller