sábado, 29 de septiembre de 2018

Oniomanía


foto del autor.

De momento me parece ocioso escribir lo que pretendo hacer ahora, pero considero que lo debo hacer, también considero que tal vez ya alguien en otra parte lo hizo igual.

Resulta que ya existen estudios con respecto a ese hábito compulsivo de algunos individuos para consumir; incluso en un tiempo se veía como adictivo, pero por conveniencia del sistema neoliberal, donde su riqueza se basa precisamente en el consumo, poco se dice ahora. ¿Para qué?, convenientemente entre más entren a esa adicción, trastorno psicológico le dicen, mejor les va a quienes viven de vender.

Pues bien después de la pequeña disertación continuó con la esencia.

Precisamente regresaba de mi compra semanal de nuestros alimentos de uno de tantos mercados que existen ahora incluyendo esos modernos que viajan con bandera de ser mejores que los tradicionales mexicanos, Cuando el chofer de taxi, queriendo entablar conversación, mencionó la poca gente que acudía al lugar. Así sucede, las compras se reparten entre más cosas que las personas desean, desgraciadamente, para ellas mismas, este gasto no siempre está bien orientado y de ahí surge la idea de que los salarios son pobres, que aquí en México lo son pero igual se los gastan mal. Existen personas que desconocen cuales son los productos básicos.

Ser desempleado o carecer de un ingreso por otras fuentes es realmente una desgracia en el mundo actual. Aunque existen quienes lo hacen, no se puede andar vagando en el mundo buscando un espacio donde vivir y recolectar nuestros alimento de lo que la naturaleza nos proporciona. Es probable que se pueda vivir así, así era como lo hicieron nuestros ancestros en el pasado. Así pues que se debe tener un ingreso y una vez teniendolo saber como administrar el flujo de dinero. Pero esto sucede en muy pocos caso, por lo general la mayoría ya se gastó por anticipado lo que recibe, así es, gastó sin tener dinero y además mal. A pocos se les ocurre planear su gasto, ¿cuentas? ni maíz las matemáticas apestan. Además eso de que nos enseñan a leer y escribir, leer poco y tal vez anuncios que venden; que ahora los que venden prefieren imágenes conociendo la pereza para leer. Escribir, algunos garabatos en el whatsapp y ya. Así que mejor nada de planes.


Al parecer vivimos en la era el placer, de la vida lúdica. la mayoría de lo que gastamos lo hacemos para recibir satisfacción de algún tipo, incluso lo básico como comer lo hacemos más por placer que por la necesidad.

Pero no crean que estoy en contra del placer, pero igual existe un trastorno psicológico relacionados con el placer en demasía, bueno a este no se le llama precisamente trastorno sino que es la adaptación hedónica.


Así pues que sí no podemos controlarnos, al menos acudir a un facultativo que nos oriente, o aceptar al menos que no existirá sueldo suficiente nunca, si no nos controlamos, incluso los millonarios lo son porque quieren tener mas dinero para tener más satisfactores ocasionando un daño a ellos y a todos los que de una u otra manera interactúan en su ambición.

Un domingo que salí rumbo al lugar de donde iniciamos la caminata con los amigos, en el transporte donde iba también una familia, la señora muy preocupada: porque no sabía como le iba hacer para conseguir el dinero para el bautizo del niño y los festejos de los santos que se aproximaban. Las necesidades básicas pasaron a segundo término o cambiaron, ya no es importante comer ahora es preferible festejar santos.

Así de la misma manera existen quiene están aterrados por no tener para pagar la televisión de paga o el contrato del móvil. Peor aún cambiar auto o móvil.

Tener más ropa de la que es riguroso tener se vuelve en algunos una verdadera catástrofe económica, ya ni decir de aquellos que les da por ir a todos los viajes que se anuncian. Ya no es suficiente estudiar para ser útiles a la sociedad sino ser aquel que más títulos tiene aunque termine enquistado a los padres por culpa de los mismos padres. Así como esos pocos ejemplos, podría llenar la “mass storage” con deseos en que gastar, que se nos muestran y nos influyen en el derroche de lo ganado.

Y como reflexión, para planchar ropa: se gasta en la plancha, y como consecuencia en la energía eléctrica, gasto por el sólo acto vanidoso heredado de llevar la ropa liza. Influencia ancestral que incluso se mira correcto al alisado y mal a quien no lo hace. Cuando en la actualidad, viviendo en las postrimerías del planeta habitable, actos como estos debemos saber que destruyen al mundo. Conciencia es la virtud primordial.

Al parecer una actitud compulsiva que beneficie a alguien es suficiente para mirarla como mina de oro, quien se fija en eso, es alguien al que eso de los sentimientos no le causa mella, actúan como psicópatas o lo son, así pues que si usted sufre por carencia de dinero para comprar debido a su desmedido hábito de consumir, existe otro que sale beneficiado quién propiciará las circunstancias para que usted siga así. Si esto lleva a una revuelta buscando que sus salarios mejoren; quienes se benefician, buscarán quien sea quien proporcione el dinero y también quien lo pague, así surgen los créditos, las crisis y los fobaproas, los gobiernos desmedidos y subdesarrollados. El que compra desmedidamente será esclavo de su consumo y fuente de ingreso de su proveedor y sin planearlo causa de crisis cuando se generaliza esta actitud.

No hay comentarios:

Publicar un comentario