Durante la madre de todas las guerras contra el crimen organizado, antes guerra contra el narcotráfico, se había utilizado un arsenal increíble, empezaron con los cuernos de chivo el AK47, luego las granadas, pasando por las escopetas y revólveres, incluyendo los famosos cartuchos mágnum, no dejando a un lado los cuchillos de carniceros utilizados para desmembrar los cuerpos.
Esta guerra maldita no para, ya llegamos a los niveles cavernícolas con ella, sin sorpresa para todos, ahora, aparecen más ejecuciones, cualquiera diría que al pasar del tiempo se llegaría a usar armas de la era espacial como los láseres o las armas de destrucción masiva. Pero ¡oh! sorpresa están efectuando sus liquidaciones con la primitiva piedra, conocida aquí como arma gris, si señores y señoras, hemos retrocedido a la edad de piedra. Durante estos quince últimos días, quedó confirmado que somos unos cavernícolas peleando una guerra inútil y entúpida.
Me empiezo a preocupar por las iniciativas legales que se enviarán al congreso por parte del ejecutivo, como consecuencia de estos crímenes, alguna prohibición para portar piedras, o quizás el delito de acopio de graba, cantera o granzón. ¿Que podremos esperar de nuestros legisladores? al menos lo de siempre, que dejen congeladas las iniciativas para las grandes reformas estratégicas. ¿Quitarán los empedrados de la calles de Taxco y los sustituirán por hule espuma?, ¿se acabarán los caminos y calles de terracería los que se volverán de materiales inocuos y seguros?. En los aeropuertos no dejarán llevar ni encendedores por aquellos de la piedra. La preocupación a llegado incluso en las panaderías de la ciudad ya que los panaderos no saben si es legal hacer la sabrosa pieza de pan dulce llamado piedra. Por el momento andémonos con cuidado y procuren, antes de salir a la calle, quitarle las piedras a los zapatos, no los vayan a detener por ir armados.
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