Llegó a mis manos un libro, “El desafío democrático La transformación del Estado en el México postautoritario” de César Cansino, al parecer a quien se lo dieron y después se deshizo de él ni siquiera lo hojeo, ¡me llegó nuevo! Así es esto de la teoría política.
Los interesados en política, principalmente quienes pertenecen al sistema creen saberlo todo, leer algo más es una actividad estéril.
Pues bien casi caigo en lo mismo pero mi diablo bueno me dijo que lo leyera así que ya lo terminé, no fue el quijote, más bien tenía el grueso de un artículo grande de revista.
El libro habla de aquello que desde hace mucho el Sr. Porfirio Muñoz Ledo pregonaba “La reforma del estado”. Este Sr. Porfirio tiene un nombre estigmatizado para la política mexicana, claro que el nunca llegaría a ser presidente para volverse como aquel, que estigmatizó el nombre, de apellido Díaz, ya que es muy inteligente, de ahí que las mayorías que son idiotas lo miren como chivo raro. Ahora son esas mayorías las que escogen, según el libro, a nuestros gobernantes. Pero sí puede seguir escribiendo prólogos, tiene de sobra con qué, también escribir libros que pocos leen.
Bueno regresando al libro, este señor explica, y que bueno, lo que es la dichosa y pregonada Reforma del Estado, ahora creo saber algo al respecto, aunque no me cuadra todavía en cuanto a que democracia se refiere y en donde debo ubicarme. Por cierto él también no lo sabe ya que dice que ése es otro rollo a tratar.
Dice, entre otras cositas interesantes, que la reforma le dará poder al pueblo. Aquí chilló la reforma, esto de darle poder al pueblo es precisamente lo que hace que ninguna reforma con esa orientación quiera hacerse. ¿Para qué? dirán los que están en el poder y deban aprobarla, todos, mayorías y minorías, sería sacrilegio, sí así como se compusieron las cosas democráticamente ellos tienen todo y lo ejercen a discreción para quedarse con lo que quepa en sus bolsillos y sus maletas.
Don Porfirio al parecer ya se dio cuenta y optó por hacer una reformita del estado de Guerrero, ¡suerte!
Tiene una buena ventaneada, el librito, para algunos dizques intelectuales, en eso bien hecho; se lo merecen, pero quiero aclarar: que intelectuales solamente como en el periodismo, quién se comporta veraces e imparciales. Si no es así, serán cualquiera otra cosa menos eso. Tal vez: paleros, les quede mejor como seudónimo.
Pues bien me divirtió el librito, ya estoy leyendo el Blog del Sr. César.
Claro que no todo es miel sobre hojuelas, pero que algo es algo.
No pues sí como dijo mi cliente: Mejor con burros que andando.
¿No era así el refrán?
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