Ayotzinapa (el regreso de Tezcatlipoca).

Cuando acontecen acciones como las sucedidas el lunes 12 del 2011 aquí en Chilpancingo, el asesinato a sangre fría de dos jóvenes estudiantes normalistas, uno se pregunta: ¿por qué sucede?

Primero quisiera recordar que esto de matar estudiantes es algo que pasa en México, existen suficientes casos documentados para considerarlo como un recurso de quienes gobiernan.

Previo a los sucesos las futuras víctimas son estigmatizadas como revoltosas. Durante el acto se les acusa de violentas. Posterior al acto se les señala como históricamente problemáticas. Se cierra el caso y nada cambia todo sigue igual. Salvo, el real y triste sentimiento que les queda a los familiares de las víctimas.

Aunque estudiar es una bandera que los gobiernos ondean durante sus periodos, la realidad es, que no la desean. Tratan a como de lugar de dificultar el aprendizaje de la mayoría de la población, incluso se esfuerza por mantenerlos en un estado de enseñanza mediocre. Si acaso algo les interesa, es todo el dinero que puede quedarles embarrado actuando como que educan. -“La educación es una inversión”- dicen. Casi puedo asegurar que murieron dos seres humanos en esta ocasión por un pleito de dinero: quienes pedían más para su escuela y educación y quienes querían más para sus camaradas.

La normal de Ayotzinapa es histórica, casi debería existir por ser eso y darle mantenimiento y presupuesto como a un icono de la educación normalista en Guerrero, como un ideal de crear maestros suficientes para llevar la educación a todos los rincones del estado, cosa que no ha sucedido; sin embargo, quieren desaparecer este tipo de normales. Mis maestros de primaria egresaron de esa normal. Yo he tenido la pena de presenciar la triste condición en que se encuentran sus instalaciones, debido al abandono que se le ha dado solamente por la necedad de ya no quererla porque no entra en la concepción de los gobernantes “modernos”. Sencillamente está peor que cuando fue fundada. Cosa que no sucedió con el Instituto Politécnico Nacional, de donde egresé, que le meten millones para mantenerlo a la vanguardia, claro este está en la capital de la república, hay que dar imagen de educados al mundo, además los egresados son materia prima para las transnacionales que operan en México, mano especializada barata o sea muchos ingenieros esperando empleo, bien entrenados con dinero del erario para enriquecer a los grandes industriales.

Es verdad que entre quienes dirigen a los estudiantes existen sujetos nefastos, como los que lideran a los trabajadores del gobierno y como en todo sindicato mexicano. Pero eso sucede, porque es como le acomoda a nuestros gobernantes para hacer de las suyas.